Beneficios de contratar a un diseñador web freelance

Caracteristicas de un sitio web para un Spa

Buena comunicación

Con un freelance tendrás una comunicación clara, fácil. Por lo tanto, los temas que trates con él serán conducidos de manera rectilínea y rápida.

Proyectos más customizados

Un buen diseñador web freelance es un profesional muy detallista, haciendo diseños web muy personalizados.

Sitio web diseñado y puesto en marcha en poco tiempo

Lo normal es que un freelance se dedique plenamente a tu proyecto de principio a fin, sin distracciones, por lo tanto, en pocas semanas podrás tener tu nueva web desplegada y funcionando. Up and running!

Seguimiento del proyecto

Un profesional freelance, mantendrá informado en todo momento a su cliente del estado del proyecto, como resultado, el avance del mismo será en las mejores condiciones.

Estilo propio

Cuando ves el portfolio de un diseñador web freelance, verás que suele tener un estilo propio definido y que sus proyectos tienen su impronta. Esto te ayudará a ver cómo sería tu página web si decides contratarlo. Pueden aportar ideas nuevas y su propia experiencia de otros proyectos.
Una agencia, en cambio, no tiene un estilo claro, lo normal es que tenga varios diseñadores que varía con el tiempo, provocando cambios en este sentido.

Menor precio

Una agencia debe afrontar una serie de gastos fijos que el diseñador web freelance no debe hacerse cargo, por lo tanto, el costo de contratar a un diseñador freelance es menor. El costo económico es mucho menor que el contratar a una persona a tiempo completo, ya que solo pagas cuando lo necesitas evitando gastos como vacaciones, obra social, etc. Pagas por el total del proyecto, no por horas trabajadas, por lo que siempre sabrás lo que vas a invertir antes de hacerlo.

Más flexibilidad

Un diseñador web freelance puede ser más flexible con ciertas peticiones de sus clientes.
Las agencias suelen tener unos plazos y metodología más cerrados, ya que deben trabajar con muchos proyectos a la vez.

Mayor participación

Un freelance ofrece una mayor participación en cada uno de los proyectos en los que se embarca, trabaja en ellos de principio a fin, desde el envío del presupuesto hasta el despliegue final.
Esto en una agencia no es fácil que suceda, pues cada profesional está trabajando en partes concretas de varios proyectos al mismo tiempo y no siente como «propios» los trabajos.

¿Querés tu web?